Es indiscutible que hoy en día las pantallas se han apoderado de nuestras vidas y también de las de los más pequeños. Las pantallas han llegado a aportar muchas cosas buenas, pero sin un uso responsable de las mismas pueden acabar siendo muy perjudiciales para nuestra vida y nuestra salud. Practicar deporte es una buena alternativa al sedentarismo que conlleva el uso excesivo de pantallas, y si además se practica al aire libre los beneficios que aporta a nuestra salud son muchos.

Ofrecer atractivas actividades deportivas al aire libre para los niños es responsabilidad de los adultos y es por ello que hemos querido repasar algunos de los múltiples beneficios que les puede aportar:

• Mejora de la salud física: el ejercicio al aire libre ayuda a los niños a mantenerse activos y en forma. Correr, saltar, trepar y jugar al aire libre contribuye a un estilo de vida saludable y ayuda a prevenir la obesidad infantil.
• Fortalecimiento del sistema inmunológico: Estar al aire libre expone a los niños a la luz solar y al aire fresco, lo que puede fortalecer su sistema inmunológico y reducir el riesgo de enfermedades.
• Desarrollo de habilidades motoras: Jugar al aire libre fomenta el desarrollo de habilidades motoras gruesas y finas como correr, saltar, lanzar, atrapar, trepar y mantener el equilibrio.
  Reducción del estrés y la ansiedad: El contacto con la naturaleza y la actividad física al aire libre puede ayudar a reducir el estrés y la ansiedad en los niños, favoreciendo su bienestar emocional.
• Mejora del estado de ánimo y la concentración: la exposición a la luz natural y la realización de actividad física al aire libre pueden aumentar los niveles de serotonina y endorfinas, mejorando el estado de ánimo y la concentración.
• Fomentar el trabajo en equipo y la socialización: Jugar al aire libre fomenta el trabajo en equipo y la interacción social entre los niños. Aprenden a compartir, cooperar, resolver conflictos y desarrollar amistades mientras participan en juegos y actividades al aire libre.
• Conexión con la naturaleza: el tiempo que pasan al aire libre ayuda a los niños a desarrollar una conexión con la naturaleza, lo que puede aumentar su aprecio por el medio ambiente y fomentar comportamientos respetuosos hacia él en el futuro.
• Fomentar la creatividad y la imaginación: el entorno al aire libre ofrece oportunidades ilimitadas para que los niños exploren, descubran y utilicen su imaginación. Pueden inventar juegos, construir fuertes, explorar la flora y fauna local y mucho más.

En definitiva, los deportes al aire libre no sólo son divertidos para los niños, sino que también son fundamentales para su salud física, emocional y social, así como para su desarrollo general.